UGT rechaza la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia de Género 2013-2016 presentada por el Gobierno en la Conferencia Sectorial de Igualdad. Sorprende esta iniciativa cuando el propio Ejecutivo ha recortado en los PGE 2013 más de once millones de euros en las actuaciones de este ámbito y cuando ha aprobado una reforma laboral que supone un varapalo para el empleo de este colectivo, sin tener en cuenta el hecho de que la independencia económica de las mujeres es un factor clave a la hora de salir del abismo de la violencia. El sindicato denuncia que se haya aprobado esta estrategia sin pasar por el Observatorio Estatal contra la Violencia sobre las Mujeres, obviando el papel de la representación legal de los trabajadores. Por todo ello, UGT exige al Gobierno que se centre en mejorar la dotación económica en este ámbito, incremente la coordinación de los operadores e implique a todos los agentes políticos, económicos y sociales en la lucha para erradicar esta lacra.

 

UGT rechaza la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres 2013-2016 presentada por el Gobierno en la Conferencia Sectorial de Igualdad y presupuestada en más de mil quinientos millones de Euros.

Resulta cuando menos sorprendente que se venda a bombo y platillo esta Estrategia como un conjunto de medidas para erradicar la violencia, cuando desde que el Partido Popular llegó al Gobierno se han recortado en los PGE más de once millones de euros para las actuaciones en este ámbito.

Además llama la atención que el Gobierno la de por aprobada sin que haya pasado por el Observatorio Estatal contra la Violencia sobre las Mujeres, donde intervienen las asociaciones de 

mujeres, los interlocutores sociales, la Fiscalía contra la violencia o el Consejo General del Poder Judicial entre otros, lo que deja en entredicho la importancia que se otorga a la participación de este órgano institucional en dicha Estrategia.

Para UGT el documento no refleja el hecho de que la independencia económica de las mujeres es un factor clave a la hora de salir del abismo de la violencia. En ese sentido, la reforma laboral ha supuesto un varapalo tremendo al empleo de las mujeres, pues más de medio millón de mujeres han engrosado las filas del paro desde que el PP llegó al Gobierno, situándose el desempleo femenino en nuestro país en torno al 26,55%.

Los lugares de trabajo pueden ser idóneos para sensibilizar, concienciar y detectar casos de violencia de género. Para ello la Estrategia plantea la colaboración de las empresas con entidades sin ánimo de lucro, obviando el papel que puede jugar la representación legal de los trabajadores.

Desde UGT consideramos que los datos estadísticos son esenciales para evaluar la repercusión de las medidas adoptadas por la Ley de Medidas de protección integral contra la violencia de género para mejorar la situación económica de estas mujeres. Estos datos son insuficientes y los que conocemos reflejan un escaso uso de los derechos reconocidos legalmente.

La movilidad entre las Administraciones Públicas de las funcionarias víctimas de violencia de género no se aborda, lo que consideramos una cuestión clave para su protección, y tampoco existen datos estadísticos

A todo esto se une que las medidas dirigidas a la inserción laboral de las mujeres víctimas de violencia se limitan a suscribir o renovar algunos acuerdos con grandes empresas para su contratación, teniendo en cuenta además, que estos contratos están bonificados. En ese sentido, UGT considera esencial el trabajo coordinado de los interlocutores sociales y el Gobierno para mejorar la actuación de las empresas, tanto en la contratación como en la vigilancia y control del respeto a los derechos laborales de las trabajadoras víctimas de violencia de género.

La Estrategia establece como novedoso la tipificación del hostigamiento y el acecho, cuando esto se encuentra ya recogido en el anteproyecto de reforma del código penal.

Por otra parte, desde UGT consideramos que la gestión de los ayuntamientos en el asesoramiento y la atención directa a las víctimas de violencia de género se verá perjudicada por la nueva Ley de Bases de Régimen Local que el Gobierno pretende aprobar.

Desde UGT creemos que el Gobierno quiere “lavarse las manos o la conciencia” en unos momentos de especial virulencia respecto a la violencia sobre las mujeres. Ayer nos hemos vuelto a despertar con un nuevo previsible caso de asesinato de una mujer a manos de su marido. Con ella serían veintisiete el número de mujeres muertas a causa de la violencia machista en lo que va de año.

Por todo ello consideramos que el Gobierno debería centrar sus esfuerzos en mejorar sus actuaciones para combatir esta lacra, con una dotación económica suficiente, incrementando la coordinación de los operadores e implicando a todas las administraciones, instituciones, organizaciones y en definitiva, a toda la sociedad en la lucha contra la violencia de género.